Catálogo Visual

La elaboración de un catálogo visual resulta imprescindible para hacer llegar la información de los productos a cualquier parte del mundo. Hay que tener en cuenta que de la calidad de este catálogo dependen en gran medida las posiblidades de éxito a la hora de establecer nuevas relaciones comerciales con clientes desconocidos. La estética visual es importantísima como carta de presentación de la empresa, la primera impresión debe ser inmejorable.

En este sentido el producto debe venderse a través de las imágenes incluidas en el catálogo. Las imágenes deben expresar las bondades del producto y crear deseo, no debemos olvidar que el cliente no podrá tocar y oler el producto cuando tenga el catálogo en sus manos. Hay que tratar de salvar esa brecha con imágenes que creen sensaciones, que identifiquen el producto con un estilo de vida, en definitiva que transmitan experiencias y creen necesidad de adquirir el producto.

A continuación vamos a repasar algunas de las cualidades que deben tener las fotografías de todo catálogo visual:

• Resaltar los beneficios del producto: La mejor manera de vender un producto es dejar que el mismo se venda. Ver ejemplo.
• Crear una experiencia que atrape al cliente: La fotografía tiene el potencial de despertar respuestas emocionales en los usuarios. Una buena fotografía añade profundidad y contexto a una historia. Se pueden usar para inspirar, provocar, entretener, enfurecer, calmar, etc. Ver ejemplo.
• Educar e informar: Compaginar el texto con estímulos visuales nos ayuda a comprender y asimilar conceptos complejos. Las imágenes son sencillas de recordar. Ver ejemplo.
• Contar una historia: Desde pequeños contamos historias, pasamos nuestra vida contando historias a amigos, familiares, etc. Las imágenes cuentan historias de forma muy eficaz. Ver ejemplo.
• Destacar la innovación: Si tienes un producto que difiere en algún aspecto de la norma, debes destacarlo. Ver ejemplo.
• Mostrar a la gente cómo hacer algo: Cuando es necesario hacer un proceso complejo, las imágenes resultan de mucha ayuda. Ver ejemplo.
• Mostrar las características y la versatilidad del producto: Así ayudamos a los usuarios a imaginarse como el producto encajará en su día a día. Ver ejemplo.
• Vender un estilo de vida: Todos nos esforzamos en vivir acorde a un estilo de vida que consideramos como ideal y compramos cosas que nos ayudan a alcanzarlo. Ver ejemplo.
• Hazlo bonito: Una buena fotografía crea contexto y añade valor a nuestro producto. Ver ejemplo.
• Crear deseo: El usuario debe imaginar lo exquisito que sabrá ese AOVE o lo idílico que resultaría descansar en ese maravilloso hotel. Ver ejemplo.
• Transmitir valores intangibles: La fotografía puede ayudarnos a transmitir valores tales como tradición, elaboración artesanal, calidad, profesionalidad, etc. Ver ejemplo.
• Consistencia: Un entorno consistente nos permite focalizar nuestra atención en lo realmente importante. Ver ejemplo.

Información basada en el libro "How to create selling e-commerce websites" de Smashing Magazine.